"Every time we say goodbye, I die a little"
Esa frase, gloriosa en su totalidad, pero parece que a mi me gusta llevarla a otro nivel.
Terca. Testaruda. Berrinchuda. Estúpida.
Siempre que hay algo que está mal, decidimos alejarnos. Decido irme.
Estúpida. No me canso de decir que nuestra relación es hermosa, que es genial, que todo lo hablamos y ya está.
¿Pero como hacerle? ¿Qué hacer cuando uno ya dio por terminado un tema, un problema, una fase... y la otra parte no puede superar o seguir adelante algo que le aqueja?
Corro. Huyo. Lo que se hacer mejor. Cecii la cobarde.
Estúpidamente e inconscientemente, tiro todo por la borda.
¿Como explicarte que yo aún no termino con pasar por una etapa que me sigue lastimando?
¿Cómo decirte que me duele escucharte cansado por mi sentir?
¿Cómo decirte "te lo dije" cuando insistías tanto en que te contara todo lo que me pasaba?
Quiero que sepas que cada vez que me voy me muero por dentro, me troza saber que la estoy cagando por enésima vez. Que sepas que me voy por miedo y me voy por coraje. Coraje al no saber que decirte para que me entiendas, coraje al no saber que hacer para dejar de actuar tan erráticamente. Me voy, porque si me quedo más tiempo me derrumbaría... aunque al final de cuentas, llego a mi cama y termino más muerta que el papá de Simba.
Huyo por que tengo miedo, tengo miedo a perderte y llevarte a un remolino de aburrición y cansancio en cuanto a mis problemas existenciales.
viernes, 17 de mayo de 2013
martes, 14 de mayo de 2013
Electrificante
Si hubiera una palabra con la que tuviera que describirlo... sería electrificante.
Dicen, que uno nunca sabe lo que tiene... hasta que lo ve perdido.
Yo no. No necesito de perderte para saberlo. Y doy gracias a los cielos y a los planetas todos los días por haberte traído hasta mi... y para mi. He escuchado historias de amoríos escabrosos, de relaciones tormentosas, y de relaciones tóxicas. No cabe duda que las pequeñeces que pasamos pierden total y completa importancia cuando me doy cuenta que hay personas que se las ven peor que nosotros. Y que, aunque suene a un cliché y te ensanches de orgullo y show offness ... me saqué la lotería contigo.
No hay persona que me conozca tan bien, como tú. Hasta tu mismo lo has dicho... podrías escribir un ensayo sobre mi, un libro, una enciclopedia. No hay día que no me sorprenda con cuan pillada me tienes. Podría atreverme a decir que hasta me puedes leer la mente.
Desde el día uno me tienes completamente idiotizada. Desde un six flags nublado y frío haces que me sienta mareada y el piso se me mueva cual gelatina tras cada beso tuyo. Cada "te amo" que se dibuja en tus ojos cuando me miras en silencio retumba en mi corazón e ilumina mi alma.
Cada uno de tus abrazos, tan fuertes y protectores, me llenan de amor y de dicha. Me gustaría poder vivir entre tus brazos pues es ahí donde más segura me siento. No hay persona tan amorosa, honesta y noble que tu, mi amado ojiverde.
Electrificante es la palabra con la que describiría nuestra relación. Siempre hay algo estimulante, algo llenador de vida. No te miento cuando te digo que cuando hay un leve roce de piel, accidental o ya sea orquestado entre nosotros, se me eriza la piel... así como cuando se toca una bola con electricidad. Se siente en la piel, se eriza, recorre el cuerpo en su totalidad. Me das pequeñas descargas eléctricas cada vez que me miras, me tocas, me besas , me amas.
Y yo ... como siempre. Rendida a ti.
Dicen, que uno nunca sabe lo que tiene... hasta que lo ve perdido.
Yo no. No necesito de perderte para saberlo. Y doy gracias a los cielos y a los planetas todos los días por haberte traído hasta mi... y para mi. He escuchado historias de amoríos escabrosos, de relaciones tormentosas, y de relaciones tóxicas. No cabe duda que las pequeñeces que pasamos pierden total y completa importancia cuando me doy cuenta que hay personas que se las ven peor que nosotros. Y que, aunque suene a un cliché y te ensanches de orgullo y show offness ... me saqué la lotería contigo.
No hay persona que me conozca tan bien, como tú. Hasta tu mismo lo has dicho... podrías escribir un ensayo sobre mi, un libro, una enciclopedia. No hay día que no me sorprenda con cuan pillada me tienes. Podría atreverme a decir que hasta me puedes leer la mente.
Desde el día uno me tienes completamente idiotizada. Desde un six flags nublado y frío haces que me sienta mareada y el piso se me mueva cual gelatina tras cada beso tuyo. Cada "te amo" que se dibuja en tus ojos cuando me miras en silencio retumba en mi corazón e ilumina mi alma.
Cada uno de tus abrazos, tan fuertes y protectores, me llenan de amor y de dicha. Me gustaría poder vivir entre tus brazos pues es ahí donde más segura me siento. No hay persona tan amorosa, honesta y noble que tu, mi amado ojiverde.
Electrificante es la palabra con la que describiría nuestra relación. Siempre hay algo estimulante, algo llenador de vida. No te miento cuando te digo que cuando hay un leve roce de piel, accidental o ya sea orquestado entre nosotros, se me eriza la piel... así como cuando se toca una bola con electricidad. Se siente en la piel, se eriza, recorre el cuerpo en su totalidad. Me das pequeñas descargas eléctricas cada vez que me miras, me tocas, me besas , me amas.
Y yo ... como siempre. Rendida a ti.
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